Los prerrequisitos para valorar un cambio de custodia son:
A) Cambio significativo en las circunstancias en las que se determinó inicialmente la custodia
B) Inadecuado ejercicio de la custodia por el titular de la misma, por incapacidad o coyuntura que interfiera
C) Problemas adaptativos de los hijos cuyo origen o mantenimiento pueda relacionarse con el desempeño parental de quien ejerce la custodia